San Felices, la Provenza soriana

Hace 12 años Damián Navascués volvió desde Madrid al pueblo soriano donde nació, San Felices, tras cerrar su empresa y lo hizo para cultivar trufa negra tras hacer los estudios pertinentes en unos terrenos de su padre. Su mujer, Virginia Re, madrileña y de padre italiano, se quedó embarazada al poco tiempo y también se trasladó a San Felices. Hoy por hoy son propietarios de 30 hectáreas de encina trufera y de 60 de lavanda y lavandín –comenzaron con 10 hectáreas el primer año–, además de regentar el hotel 'Las Abadías' en el mismo municipio en el que viven 55 personas durante el año.

Virginia Re explica que «decidieron «recuperar un cultivo autóctono de hace muchos años en este lugar y los vecinos ganaban un dinero extra con la recolección del espliego». Estos montes, a los pies del Moncayo, cuentan con gran tradición en el cultivo de plantas aromáticas debido a que el clima y la tierra son adecuados para ello.

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Fecha noticia: 16 may 2022